Por Draco de La Puente
Twitter: @DreikZG
Las heridas siempre distinguen a los más fuertes. Con 25 años, después de más de un lustro de caminar con miras a la cima del rap chileno, Martín García, para nosotros conocido como Acertijo, botó lágrimas con sabor a esfuerzo tras haberse consagrado como el campeón nacional de Red Bull Batalla de los Gallos Chile 2020 y asegurar su cupo al certamen internacional.
Lo que a simple vista pareció una reñida final para varios, para los que realmente conocieron la historia del Acertijo fue el clímax del último obstáculo que tendría que abatir para ocupar el trono que solía tanto añorar desde la calle. Este relato selló su capítulo final el día de ayer, un 12 de septiembre del 2020. El día en que Martín habría dejado de escribir una historia para empezar otra. Así es como paso todo:
El rapero de la octava región empezó a competir en batallas de freestyle en el 2015 apenas teniendo 20 años. Tan solo un novato, Martín se introdujo sin ningún problema a la vida alternativa que comprende parte de esta cultura urbana, visitando la mayor cantidad de plazas en el sur para medirse con los pesos pesados de su región. Cegado por un amor indescriptible que le regaló la movida del rap chileno, Acertijo se enamoró del cemento fresco de la acera, del resoplido de la caja parlante en sus tímpanos, y del respeto de los gritos que mayormente desconoció. Un joven estaba en una relación poliamorosa con la calle y todos los elementos que construyen al Hip-Hop.
Poco antes de terminar el 2015, el rapero chileno cerró su primer año logrando un subcampeonato contra JNO en Vivir o Morir. Poco después en 2016 probó su suerte en la madre de todas las competencias: Red Bull. Lamentablemente, sus ganas aún no habían sido dotadas con la experiencia necesaria para enfrentar los golpes que a muchos freestylers les entregó un escenario. Martín fue derrotado por Sador en octavos de la regional de Santiago, desde aquel entonces comprendió que no existe montaña fácil de escalar y decidió continuar puliéndose con apoyo de la calle.
El 2017, tras dos años de dedicarse a las callejeras, su nombre empezó a sonar en las competencias urbanas más prestigiosas en Chile, sobre todo tras ganar una DEM. En la mitad de temporada Acertijo se midió y abatió a Fusok, uno de los nombres más clásicos y queridos del underground chileno. Martín ya era parte de la élite de la DEM, bajando ocasionalmente a varias de las fechas en equipo donde tuvo destellos que más adelante lo llevaron a convertirse en un Allstar. Sin embargo, con vísperas a un mejor año, el mundo se encargó de hacerle recordar a Martín que la gloria a veces se tiñe con sangre propia.
La madera más dura es aquella que rosa más veces su piel contra un hacha. Durante el 2018, Martín compartió por primera vez miradas con la muerte: un corte en la cara producto de un asalto frustrado en su propio barrio lo bautizó con la cicatriz que le obsequió la fama. A pesar de haberse hundido por bastante tiempo en el rebobino de esa circunstancia, el rapero de la octava despertó ese año consagrándose campeón de BDM Gold frente a Teorema y campeón de la Regional de Red Bull Valdivia. Por si fuera poco, el renovado freestyler consiguió un tercer lugar tras caer en la semifinal con el campeón de esa edición, Pepe Grillo.
Su primera Internacional
Acertijo fue a su primera internacional siendo esta BDM en donde se midió por primera vez con los mejores de la élite de esa disciplina. Fue ahí cuando se cruzó con el mejor de la historia en cuartos de final, cayendo lamentablemente contra el Aczino tras haberle parado lo que varios gritos confirmaron como un batallón. Martín se recibió como sociólogo a finales del año, dándole un cierre poético a un 2018 de altibajos. El MC ganó respeto, reconocimientos, campeonatos, pero fue su fortaleza mental la herramienta que lo empezó a distinguir, más que como rapero, como un ser humano.
El 2019, fue una época de tropiezos para ya un Acertijo de 24 años. Tras haber sido galardonado con un puesto en la FMS Chile, el rapero estaba convencido que este año iba a cerrarse con un broche de oro dado al éxito del anterior. No fue así. En Red Bull logró ocupar el tercer puesto estando cerca nuevamente de ansiar el tan buscado trono, pero fue su compañero Jokker quien cortó sus alas para luego ser su amigo Teorema quien se alce con el triunfo. En FMS aprendió una lección importante tras haber respirado el anillo durante tantas jornadas. Estuvo a centímetros de levantar la copa del primer campeón de Chile en FMS pero un exceso de confianza lo hizo tropezar con un verdugo que lo estancó en el segundo lugar: El Menor.
En 2020, recién lo vimos competir cuando volvió a iniciar la liga chilena, Martín había crecido. Era lo más pulido que estaba, flow, ingenio, estructura, métrica, elementos que lo distinguieron con el tiempo como uno de los raperos más completos de la escena chilena. Sin embargo, su prueba sería la Red Bull Nacional de Chile. Su tercer intento, la última batalla en su historia.
Su camino al título del 2020
La Red Bull empezó con Acertijo enfrentándose en octavos a Bas, a quien superó tranquilamente dado a su diferencia de actividad en la disciplina. Sin embargo, el camino se vería más difícil de ahora en adelante dado a que Martín tendría que superar a una leyenda chilena y ex campeón nacional en el 2013: Stigma. Quizás la batalla más ardua de la noche en cuanto a fuego cruzado, una con mucho sentimiento y bastantes ganas de ambos participante. Tras el término se concedió una réplica en donde Stigma le diría al rapero de la octava todo lo que ha luchado durante su carrera y declarando: “Un verdadero campeón se corona a la primera”. No obstante, Martín tras haber sufrido un camino agobiante hacia la cima, respondió con serenidad: “Estas son batallas de rap, no de quien ha sufrido más”. Frase que en contexto le permitió ganar la ventaja para avanzar a la semifinal.
Los gigantes no son el enemigo más peligroso, y eso es algo que Acertijo ya había aprendido. En una batalla de redención, Martín volvió a competir cara a cara con El Menor, aquel que le arrebató el título de FMS y venía de haber sacado en cuartos de final a Jokker. En esta batalla Acertijo marcó uno de los mejores minutos de esta edición el cual dejó al “heredero al trono” muy por debajo en el puntaje. Pese a que El Menor le recordó que no cante victoria antes de tiempo como lo había hecho el año pasado, Acertijo ya había aprendido su lección y fue sin misericordia a conquistar la deuda pendiente que tenía con el pequeño gallo.
Acertijo llegó a la final contra una de las revelaciones de la escena Chilena por su ingenio y métrica: Rodamiento. Un primer round que mostró minutos puros de freestyle, un segundo con objetos en acapella que le permitió aclarar al oriundo de concepción que esta vez no iba a desaprovechar su oportunidad y un tercero que terminó en una guerra de barras igualada. Una final pareja, que resaltó lo mejor de cada participante que fue digna de una réplica. Finalmente, la pasión del MC se impuso ante la falta de experiencia de un Rodamiento que venía en racha en uno de sus mejores días y en un vaivén de lágrimas de felicidad, su cuello lo relució como el campeón nacional de Chile.
Varios estarán y no estarán de acuerdo. Pero Acertijo ayer demostró de ser uno de los talentos más puros y completos de Chile en la disciplina. Aquellos que venimos siguiendo este arte, somos conscientes que este día estaba dispuesto a llegar hace tiempo, pues no hay nada más enriquecedor que ver como la vida premia el arduo trabajo.Se trata de un gran rapero, es un buen exponente, es un merecido representante, es una linda historia de superación y constancia, pero de antes de todo esto, Acertijo sigue siendo Martín, y esa es una de las lecciones que el freestyle nos deja. Pase lo que pase, el 12 de septiembre de este año siempre quedará marcada como la noche en que le dio al freestyle, lo que el freestyle hizo por él.
Felicitaciones a Martín. Ahora es tiempo de escribir otra historia y no habrá nadie quien lo pare, o mejor dicho, no habrá nada que lo corte.
Fotos: cortesía Red Bull Pool Content